lunes, 12 de octubre de 2009

El orgullo de ser costarricense




Que orgulloso me siento de ser costarricense.



El 12 de Octubre de 1969, me encontraba en Bogotá, estudiando en la Universidad Nacional, la cual había sido invadida por el Ejército colombiano, debido a una serie de manifestaciones que los estudiantes habíamos realizado por la muerte de uno de nuestros compañeros mayores, Rómulo Carvalho, el cual había sido desaparecido y luego muerto después de “un enfrentamiento con los militares cuando se prestaba para alistarse a las FARC”, como decía el parte militar.
Durante esos días se impuso el toque de queda nocturno, y en las calles de la ciudad no se podía caminar en esas horas, sin que lo detuvieran a uno para hacerle una revisión, sobre todo si uno llevaba un maletín como acostumbramos en nuestra época de estudios. Dichas revisiones eran muy detalladas, por lo que cuando uno presentaba un pasaporte extranjero, único documento que tenias para identificarte, las suspicacias eran mayores. Y como es lógico durante esa noche te tocaba pasar en la detención militar, mientras verificaban tus antecedentes, y hasta que llegaba un familiar a reclamarte, podías salir de ahí. Mi pobre tía María Eugenia Ulloa, tuvo que correr en varias oportunidades para hacerlo. Y como se puede tener a un costarricense encerrado en su habitación cuando lo que más amamos es la libertad.
En la Escuela Militar, en la Avenida Séptima, hay un monumento muy especial, un tanque de guerra tipo Sherman, de los usados por las fuerzas armadas en la Segunda Guerra Mundial, y se encuentra en la entrada a dicha escuela, que en esos días era también el lugar donde nos llevaban por infringir el toque de queda, además de que quedaba muy cerca de Chapinero, Calle 59, donde vivía en aquellos tiempos.
Al salir de la detención le pregunté a uno de los oficiales que si se me permitiría ver el Tanque de guerra, ya que en mi país nunca habíamos visto ninguno, así como nunca vimos las tanquetas ingresar a una Universidad, ni tampoco soldados fuertemente armados, como los que había visto en días pasados ingresar a la misma, ya que en mi país, se había abolido el Ejercito hacia 21 años, y yo contaba apenas con 19 años.
¿Cómo es eso? Me interpeló el Oficial. ¿Cómo puede un país vivir sin Ejército?.
Ahí, se me salió todo el orgullo costarricense, y al Oficial, junto a los que se encontraban con él, les comencé a dar una de las lecciones más grandes de lo que es una democracia, cuando esta está basada en los valores civiles, en el amor a la paz.
Inicié mi relato, con la Guerra Civil de 1948, con su triunfo por parte del Ejército de Liberación Nacional, dirigido por un general sin estrellas, Don José Figueres Ferrer, el cual venció en los primero meses del año y inicio un gobierno de facto, la Junta Fundadora de la Segunda Republica, y que en Diciembre de ese mismo año en un acto simbólico, abolió el ejército como institución del estado, que luego se plasmaría en artículo 12 de nuestra Constitución Política.
Los oficiales del ejército colombiano, a los cuales se le habían sumado otros militares, incluyendo uno de mayor grado, comenzaron a preguntarme sobre el tema, para ellos increíble, que un Jefe de Ejército, propusiera la abolición del suyo. En Colombia, no duraría más de tres días, fue una de las tantas manifestaciones que se dieron. A lo que les respondí, que tuvo el valor de llamar a una Asamblea Constituyente, y luego de que esta hubo redactado la nueva constitución política, entregó el poder a los civiles.
Con gran orgullo les dije, que José Figueres Ferrer, fue presidente del periodo 53-58 y que actualmente es el candidato del Partido Liberación Nacional, para las elecciones en Febrero de 1970.
El General Santollo, luego me invito al Club Militar para que diera la misma charla, a un grupo de amigos personales, pero eso es otra historia.
Hoy 12 de Octubre, sigo siendo más orgullosamente COSTARRICENSE Y LIBERACIONISTA, al saber que por las actuaciones de José Figueres Ferrer, Daniel Oduber Quirós, Luis Alberto Monge Alvarez, Rodrigo Facio Brenes, y muchos otros grandes miembros del partido, nuestro país es un oasis, en la sequedad de la democracia de America Latina.
58 años de la Fundación del partido de los costarricenses, el único partido con plataforma ideológica democrática que se ha fundado en nuestro país, y continua siempre vigente: LIBERACION NACIONAL.